¿Alguna vez te has imaginado desayunando frente al mar, sintiendo la brisa y dejando que la mirada se pierda en el horizonte?

Este chalet adosado en Valdenoja hace realidad ese sueño y muchos más. Aquí, el mar no es solo una vista, es parte de tu día a día. Desde que abres la ventana hasta que cae la noche, la belleza del Sardinero te acompaña.

La vivienda está distribuida para vivir cómodamente, con espacio para todo y para todos. 

Una de las joyas de la casa es, sin duda, el salón. Amplio, luminoso y con acceso directo a una terraza que parece sacada de una postal. Imagínate compartiendo cenas al aire libre, con la barbacoa encendida y el mar como telón de fondo. Son esos pequeños placeres los que convierten un lugar en hogar.

La cocina, renovada y práctica, conecta con la zona de día, mientras el aseo de cortesía añade ese punto de funcionalidad que se agradece en el día a día.

La parte superior está pensada para descansar y desconectar. Los dormitorios son amplios y  llenos de luz . La suite principal, es ese refugio privado que todos soñamos. Un espacio amplio, con vestidor y baño en suite, y su propia terraza orientada al sur, perfecta para dejarse acariciar por el sol mientras la ciudad queda a tus pies.

Y como toda casa pensada para disfrutar, este chalet también tiene un espacio único, más de 80 m² donde reunirse con amigos, jugar al billar, celebrar cualquier ocasión o simplemente dejar pasar el tiempo sin prisas. El garaje privado con puerta automatizada tiene  capacidad para dos coches, espacioso y seguro, proporcionando la máxima comodidad y almacenaje adicional.

Todo esto en Valdenoja, una de las zonas más agradables de Santander. Un barrio residencial, tranquilo y cómodo, donde tienes todos los servicios y transporte a la puerta de casa. Lo mejor, sin duda, es que la playa está tan cerca que puedes ir andando. Aquí, el mar no se mira desde lejos, se vive.

Una casa hecha para disfrutarla cada día. Un lugar donde el mar, el espacio y la luz se encargan de recordarte que has encontrado ese hogar que tanto soñabas.

El precio de venta no incluye impuestos propios de la transmisión, gastos de Notaría, Registro, ni cualquier otro que según Ley pueda corresponder al comprador.